La dermatitis atópica o eccema atópico es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel. El síntoma principal es el prurito, es decir el picor en la piel, que puede ser lo suficientemente severo como para impedir el descanso nocturno.
Formas de presentación
Teniendo en cuenta la edad de cada paciente, la forma de presentación de la dermatitis atópica puede tener peculiaridades. No obstante, en general, su localización suele cumplir una serie de patrones:
- En niños menores de 2 años. Las lesiones predominan en la cara, sobre todo en las mejillas, respetando las zonas de alrededor de los ojos, nariz y boca.
- En mayores de 2 años y hasta la adolescencia. Las lesiones tienden a situarse en los pliegues, de forma simétrica.
- En los adultos. La localización es más variable. Aunque la afectación de los párpados es muy característica.
Picor: reto del tratamiento de la dermatitis atópica
El impacto clínico del picor en la piel afecta tanto al dominio físico como al dominio emocional y psicológico, tanto en el niño como en los familiares. Presenta un efecto negativo sobre su calidad de vida, ya que reduce la calidad del sueño. Además, interfiere en su actividad diaria en el colegio y en su relación con los demás. La piel de estos niños presenta una mayor pérdida de agua, es decir una menor hidratación con pérdida de la función reguladora y protectora de la piel.
El rascado debido al intenso picor altera la barrera cutánea que ya previamente está dañada y agrava la situación. El daño crónico causado por el rascado incontrolado puede conllevar la aparición de infecciones y la formación de cicatrices. Por tanto, el control del picor de la piel es otro de los pilares en el tratamiento de la dermatitis atópica es objetivo prioritario en el tratamiento de los lactantes y niños que la padecen.
¿Cómo podemos aliviar el picor en la piel?
Existen una serie de consejos que pueden prevenir los síntomas de la dermatitis atópica. Existen rutinas diarias que pueden ser muy útiles para aliviar el picor que, en ocasiones, puede llegar a ser muy intenso.
Entre muchos, destacamos estos 6 consejos:
- Higiene diaria. Es recomendable el baño o ducha diarios. De duración corta, con agua templada. Es preferible emplear limpiadores de ducha no jabonosos (tipo “syndet”).
- Hidratación. Tras el baño o ducha, es recomendable aplicar una crema hidratante en las zonas del cuerpo y cara que no tengan una dermatitis activa. Es decir, las que no están enrojecidas.
- Ropa. Se recomienda que la ropa que entre en contacto directo con la piel sea de algodón u otros tejidos naturales, como seda o lino. Se debe evitar la lana y la fibra sintética. Es preferible emplear lavadora automática y evitar el empleo de suavizante. Se recomienda recortar las etiquetas que puedan rozar con la piel.
- Se recomienda utilizar guantes para realizar las tareas domésticas.
- Evitar cubrir excesivamente la piel. El sudor puede empeorar los síntomas.
- En los bebés, cambiar los pañales cuando estos estén húmedos.
Tratamiento actual
Actualmente, no existe curación para la dermatitis atópica. El objetivo del tratamiento es la mejora de la calidad de vida de los pacientes mediante la disminución de la sintomatología asociada y la disminución de los brotes. El manejo habitual de la dermatitis atópica incluye el tratamiento de manera crónica con corticoides tópicos, antihistamínicos y, en ocasiones, antibióticos.
Emolientes
Además del picor, otro de los síntomas de la dermatitis atópica es la sequedad de la piel o xerosis. Este síntoma justifica que el tratamiento diario con emolientes sea uno de los pilares del tratamiento. Su uso disminuye la sequedad cutánea y reduce de la pérdida de agua.
Otros tratamientos coadyuvantes
Además de lo ya expuesto, existen otro tipo de tratamientos coadyuvantes para la dermatitis atópica como:
- Los probióticos. Cada vez se está hablando más de cómo el desequilibrio entre las bacterias que habitan normalmente en nuestro intestino pueden ser un factor agravante y desencadenante del brote de dermatitis. La conexión del intestino con la piel está cada vez más probada y ya se están utilizando probióticos en el tratamiento de la dermatitis atópica.
- Cremas con principios activos naturales a base de ectoína. La ectoína ha demostrado tener capacidad regeneradora del daño causado por las agresiones externas a la piel. Su capacidad de atracción de moléculas de agua es muy superior a la de otros componentes, favoreciendo así la hidratación de la piel.
Buenísimo el aporte. Un cordial saludo.