Tomar melisa te ayuda a dormir mejor

Son muchas las plantas conocidas por su acción favorable respecto al sueño. Quizás, las más conocidas puedan ser la valeriana, la pasiflora, el espino blanco o la lavanda.

En este caso concreto, hablaremos de las propiedades que tiene la melisa a la hora de dormir.

Alteraciones del sueño: problema muy común

Quizás por el estilo de vida de nuestra sociedad, quizás por entornos inadecuados o incluso por una mala alimentación. El caso es que las personas que sufren alteraciones del sueño son cada vez más numerosas.

En España se calcula que aproximadamente un tercio de la población tiene dificultades para dormir o para mantener un sueño de calidad toda la noche.

En los niños, aunque nos parezca lo contrario, las cosas no están mucho mejor, pues esta cifra oscila entre el 10 y el 30%. Por su parte, en la adolescencia, parece que estas cifras remiten un poco y encontramos afectados a entre un 3 y un 12% de los jóvenes. Eso sí, es más frecuente en las chicas que en los chicos.

Lo peor, es que un grupo importante de estas personas que tienen dificultades para el sueño no solamente pasarán “una mala noche” sino que, además, pasarán “un mal día”.

Esto es lo que se llama síndrome clínico completo de insomnio crónico. Es decir se produce cuando las alteraciones en el sueño tienen consecuencias diurnas como cansancio, somnolencia, alteraciones de la memoria o de la atención.

Tratamiento farmacológico contra el insomnio

Pasar una, otra y otra noche sin dormir puede ser realmente agotador. Afecta no solo al sistema nervioso, sino también, a la larga, al sistema inmunológico y al sistema endocrino. Además empeora el curso de numerosas enfermedades. Por eso, las personas con dificultades del sueño buscan una solución a sus problemas.

Aproximadamente un tercio de las personas con insomnio, sigue un tratamiento con benzodiacepinas.

Las benzodiacepinas son el grupo de medicamentos más comúnmente utilizados para el insomnio.

Son eficaces, consiguen que el paciente duerma un periodo adecuado de tiempo, pero no son apropiadas para tratamientos a largo plazo y producen ciertos efectos adversos. Por eso deben utilizarse siempre bajo control médico y en los pacientes y en los momentos adecuados.

Si representamos el tratamiento del insomnio con la imagen de una escalera, antes de llegar a lo alto de la escalera, que representaría el tratamiento farmacológico, hay que pasar por los peldaños inferiores.

Quizás en alguno de esos peldaños esté la solución y no sea necesario llegar hasta lo más alto de la escalera.

Mejora tus hábitos del sueño

El primer escalón por el que se debe pasar es el de los hábitos del sueño. Muchas de las personas que tienen un mal dormir, podrían encontrar una gran mejoría observando estas normas:

• Cenar moderadamente y suprimir los alimentos que producen digestiones pesadas. En este grupo se encuentran las grasas, legumbres o algunas verduras crudas que producen meteorismo.
• Evitar la ingesta de bebidas estimulantes. Seguro que todos pensamos en café y té, pero hay que saber que algunos refrescos o el cacao también son excitantes.
• No utilizar ordenadores, tablets, móviles y pantallas luminosas en general, antes de dormir.
• No leer libros demasiado interesantes o atrayentes. Si la historia nos engancha, nos pedirá seguir leyendo y no nos ayudará a llegar a un estado de relajación adecuado.
• No fumar antes de ir a dormir.
• Tener en cuenta que algunos medicamentos alteran el sueño. Si es así, se debe consultar con el médico por si fuera posible ajustarlos de manera que se solucione o minimice este efecto adverso.
• Mantener los horarios de sueño de la manera más regular posible. Además, es aconsejable evitar las siestas prolongadas de más de 20 minutos.
• No llevarse a la cama los problemas o las discusiones del día.
• Utilizar técnicas de relajación.

No debería iniciarse ningún tratamiento si no se ha evaluado previamente que el paciente conoce y sigue estos consejos. Si aun siguiendo estos consejos existe una dificultad para conciliar o mantener el sueño, entonces se puede recurrir a alguna de las plantas que han demostrado su eficacia en este sentido.

¿Es útil tomar melisa para conciliar el sueño?

Ya hemos dicho que son muchas las plantas conocidas por su acción favorable respecto al sueño. Entre las más conocidas se encuentra la melisa. Pero tenemos también la valeriana, la pasiflora o la amapola.

Es una planta herbácea que, según las zonas geográficas, se conoce como toronjil o hierba limonera. Este último nombre se debe a que si se frotan las hojas, estas desprenden un aroma que recuerda mucho al limón. Es una especie originaria del Mediterráneo y en España se puede encontrar distribuida por toda la península.

La parte de la planta con propiedades medicinales es fundamentalmente las hojas.

En ellas se encuentran los principios activos responsables de su efecto. Estos principios activos actúan sobre el sistema nervioso central, de ahí su actividad sedante, beneficiosa para el sueño. Por ello se saben lo beneficiosa que es la melisa para favorecer el sueño. Pero también se le conocen propiedades digestivas, espasmolíticas, analgésicas, antibacterianas y antiviral, antioxidantes y analgésicas, así como protector hepático.

Respecto a su papel sobre el sistema nervioso central y sobre el insomnio se han realizado distintos estudios que avalan la acción favorable de tomar melisa para dormir.

Se ha comprobado cómo la administración de esta planta, favorece la inducción del sueño y mitiga los efectos del estrés. Se han hecho también estudios con la combinación melisa-valeriana, consiguiendo estos mismos efectos.

También en menores de 12 años se han comprobado sus resultados, siendo eficaz en un porcentaje amplio de los niños estudiados (80-90%).

Sin contraindicaciones

Una característica importante de esta planta es que a las dosis habitualmente recomendadas no se han descrito reacciones adversas.

Pero hay que tener en cuenta que, por su efecto sedante ligero, podría potenciar el efecto de otros sedantes. Por ello, si se toma simultáneamente con éstos, habría que ajustar las dosis.

No presenta tampoco contraindicaciones. Es decir, es adecuada para todo tipo de personas. Pero tanto las embarazadas como las madres lactantes deben consultar con su médico la conveniencia o no de tomar cualquier sustancia, aunque sea natural como es el caso de la melisa.