Al hacer ejercicio es normal que nuestra frecuencia cardiaca aumente. Es más, no sólo es normal, es necesario porque nuestros músculos demandan más oxígeno que les llega a través de la sangre y, por tanto, el corazón tiene que bombear más rápido para atender esta demanda.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.