Después de comer es muy común que nos empiece a entrar el cansancio y las ganas de echarnos una cabezadita. Además de ser un auténtico placer, los beneficios de la siesta son muchos y un estupendo momento de relajación para el cuerpo y la mente.
Si se siente somnolencia, es porque se necesita reponer energías y se trata de un mensaje claro de nuestro organismo.
¿Qué es la siesta?
Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua (RAE), la siesta se define como el sueño que se toma después de comer o bien como el tiempo destinado para dormir o descansar después de comer.
El origen etimológico del término es más ilustrativo. Siesta viene de la expresión latina “hora sexta”, que designa al lapso del día comprendido entre las 12 y las 15 horas, momento en el cual se hacía una pausa de las labores cotidianas para descansar y reponer fuerzas.
En España cerca del 24% de la población se echa la siesta habitualmente en días laborales y el 27% en festivos.
Este dato demuestra que echarse la siesta no depende tanto de los compromisos laborales diarios, sino, más bien, se trata de un hábito que unas personas tienen adquirido y otras no.
¿Cuáles son los beneficios de dormir siesta?
Los beneficios del sueño sobre nuestro organismo no se logran únicamente durmiendo en las noches. Las siestas suman a nuestro bienestar.
Dormir una siesta puede ser una manera de ponerse al día con el descanso, aumentar la productividad y ser más creativos.
La siesta deja al cuerpo en un estado relajado, contrarrestando los efectos del estrés diario.
Existen múltiples estudios que corroboran las ventajas de la siesta en relación al aprendizaje y la memoria, entre otros:
- Mejora la alerta. Podremos, después de una reparadora siesta de 20 minutos, estar pendiente de todo lo que nos rodea. Podremos reaccionar y adaptarnos a las distintas situaciones.
- Conseguimos mejorar el rendimiento físico y mental.
- Podemos acabar con la somnolencia.
- Mejora la memoria a corto plazo. Se puede decir que la memoria a corto plazo es la que nos permite retener una cantidad limitada de información durante un periodo de tiempo relativamente breve. Y es importante que funcione correctamente porque ayudará al aprendizaje de nuevos conocimientos y nos permite resolver problemas.
- Mejora el tiempo de reacción.
- Nos ayuda a aumentar la estabilidad emocional. Dormir aumenta la producción por parte de nuestro cerebro de serotonina, lo que nos proporciona una sensación de satisfacción y bienestar.
- Disminuye el riesgo de hipertensión arterial. Según la Fundación del corazón, la siesta ayuda a disminuir en un 37% el estrés y el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
- Conseguimos recuperar la capacidad defensiva del organismo ante las infecciones. Sin duda no dormir suficiente tiene consecuencias negativas para la salud. Por ejemplo, debilita nuestro sistema inmunológico. Dormir es un pilar fundamental de la salud y debemos mejorar nuestra higiene del sueño para mantener un estilo de vida saludable.
Cuando se duerme, se libera la hormona del crecimiento, que estimula el sistema inmunológico, reduce el estrés y la ansiedad, ayuda a recuperar los músculos y a perder peso.
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¿Quieres aprovechar mejor la siesta?
No es cuestión de echarse la siesta de cualquier manera. Hay algunos consejos que nos pueden ayudar a aprovechar mejor la siesta y evitar algunos efectos secundarios como el dolor de cabeza o las alteraciones del sueño. Entre estos están:
- Horario. El mejor horario para echarse una siesta es entre las 13 y las 15 horas. Es en este periodo cuando el nivel de energía decrece por el aumento de melatonina a esa hora. Si te echas la siesta después de las 15 horas puede que te interfiera con el sueño nocturno.
- Oscuridad. Conseguirás dormir mejor si la habitación está a oscuras.
- Busca un lugar tranquilo. Es importante no ser molestado durante la siesta.
- Tiempo máximo de 30 minutos. Si duerme más de 30 minutos corre el riesgo de entrar en un sueño profundo y luego, al despertarte, te sentirás más cansado y aturdido. De hecho, hay muchas personas que aseguran sentirse bien con una siesta de 1 o 2 minutos (para gustos, los colores). Pero, en concreto, las siestas de 15-20 minutos relajan y disminuyen mucho la somnolencia diurna.
- Pon la alarma. Si te cuesta mucho no dormir más de 30 minutos, puede ser una opción muy interesante poner una alarma o puedes pedirle a otra persona que la despierte.
- Tómate un café antes de echarte la siesta. Algunas personas dicen que si toman un café inmediatamente antes de dormir la siesta, se sienten mejor. La cafeína hace efecto entre los 10 y 20 minutos de haberla tomado. La persona se siente con más energía cuando se despierta debido a la combinación de la siesta y la cafeína.
Si la siesta interfiere en el sueño nocturno, ¿qué hago para no dormirla?
Es cierto que para las personas que padecen insomnio o una mala calidad del sueño por la noche, no es recomendable echarse la siesta.
En estos casos, desaparecen los beneficios dormir siesta para convertirse en un problema. Por ello, para evitar que echarte la siesta sea contraproducente puedes:
- Realizar un paseo corto. Puede ayudarte a dar un paseo después de comer. Aire fresco y ejercicio son dos buenos aliados para oxigenar el cerebro.
- Come más ligero. Intenta comer porciones más pequeñas y con alimentos más saludables. Y, en este sentido, evita los carbohidratos o comidas copiosas que te hacen sentir adormilado.
- Bebe mucha agua. Cuando existe deshidratación, nos fatigamos más. Por eso, beber mucho líquido te hará estar más alerta y despierto.
¿Y tú, eres de echarte siestas?
Referencias
https://www.iis.es/la-siesta-beneficios-salud-unicad-clinica/
https://institutoeuropeodelsueno.com.pa/dormir-fortalece-nuestro-sistema-inmunologico-contra-virus/
https://institutoeuropeodelsueno.com.pa/dormir-la-siesta-es-una-buena-practica-dentro-de-la-higiene-del-sueno/
https://fundaciondelcorazon.com/blog-impulso-vital/2854-los-10-beneficios-de-una-buena-siesta.html
