Vómitos y diarreas son los principales síntomas que nos ponen en alerta de una posible gastroenteritis. Es una entidad de gran importancia por su elevada prevalencia y, por tanto, supone un motivo frecuente de consulta en atención primaria.
¿Por qué tengo gastroenteritis?
La gastroenteritis se produce como consecuencia de una inflamación de la mucosa gástrica e intestinal que se traduce clínicamente en un cuadro de diarrea aguda (DA).
Generalmente aparece de manera muy rápida, pero de carácter autolimitado porque la mayoría de los casos de diarrea vírica duran menos de una semana, y la mayoría de las personas mejoran por sí solas sin tratamiento médico. Además de esta diarrea aguda, puede ir acompañado de otros síntomas como náuseas, vómitos, fiebre o dolor abdominal.
Existen diferentes virus que pueden provocar gastroenteritis. Destacan los norovirus, rotavirus, adenovirus y astrovirus. En concreto, el norovirus es el que causa infecciones en personas de todas las edades. Y, por su parte, el rotavirus, adenovirus y el astrovirus, con mayor frecuencia, infectan a bebés y niños pequeños, pero no quiere decir que no puedan infectar a los adultos.
Diarrea: síntoma principal de las gastroenteritis
Con la diarrea se produce un aumento en el número o volumen de deposiciones, o bien un aumento en su fluidez en relación con el hábito intestinal previo del individuo. Se considera aguda si la duración es inferior a 3-4 semanas y persistente o crónica cuando dura más.
Qué hacer si tengo gastroenteritis
Si bien es una enfermedad molesta, generalmente no es grave. La mayoría de los casos de diarrea vírica duran menos de una semana, y la prácticamente la totalidad de las personas mejoran por sí solas sin tratamiento médico, aunque necesita un tratamiento sencillo para evitar complicaciones.
Salvo exista alguna circunstancia especial, no son de utilidad ni los antibióticos ni los antidiarreicos.
Rehidratación oral
Durante las primeras 12 horas es importante no tomar alimentos sólidos, especialmente si te encuentra con náuseas o vómitos. Lo que es imprescindible es evitar la deshidratación.
Como norma general se utiliza la terapia de rehidratación oral (TRO) como base del tratamiento. Los pacientes se tratan con soluciones de rehidratación oral (SRO), reemplazando los líquidos y electrolitos perdidos para prevenir la deshidratación. En algunos casos más graves será necesaria la utilización de rehidratación por vía endovenosa.
Las soluciones de rehidratación oral son líquidos que contienen glucosa y electrolitos. Ejemplo: sales de sodio, potasio, magnesio, glucosa, citrato y actualmente algunas soluciones en su composición incluyen un probiótico.
Pero también puedes beber abundantes líquidos, en pequeñas cantidades, de manera continua.. Se debe ingerir dos o tres litros al día de agua o también tomar limonada, agua de arroz o zanahoria o las infusiones de manzanilla.
Dieta astringente
Poco a poco, y según vayas tolerando el líquido, es bueno que empieces a comer. De hecho, la investigación muestra que seguir una dieta absoluta no ayuda a tratar la gastroenteritis vírica. Y está contraindicada en niños, siendo más adecuada la utilización de una dieta astringente en ellos.
Se permiten alimentos tipo:
- Verduras. Sopa de zanahoria o puré de patatas y zanahorias.
- Frutas. Manzana asada, compota de manzana, manzana oxidada con unas gotas de limón (ralladas o peladas y partidas en trozos dejando al aire un rato para que se oxide), membrillo o plátano maduro.
- Farináceos, que son ricos en hidratos de carbono y que apenas contienen grasa. Como la sopa de arroz, el pan blanco tostado, pasta cocida, papillas de harina de arroz o de maicena (con agua o leche sin lactosa).
- Carnes. El pollo o pavo cocido o a la plancha (sin piel). También ternera y lomo de cerdo, con la menor cantidad de grasa posible. Jamón cocido sin grasa.
- Pescados. También en sopa de pescado. Pescado blanco cocido o a la plancha (merluza, lenguado, rodaballo, rape y gallo).
- Otros. Huevo pasado por agua, duro o en tortilla a la francesa. Yogurt y queso fresco (únicos derivados lácteos que debe tomar). En el desayuno se tomarán infusiones claras de té o manzanilla, edulcoradas con sacarina y pan tostado.
Pero cuidado con…
- Leche y derivados (salvo el queso fresco y el yogurt natural).
- Alimentos grasos, fritos y grasa para cocinar.
- Evitar durante una semana las verduras de color verde (acelgas, espinacas, lechugas…), las legumbres, así como la ingestión de almendras, compotas, nueces y pan negro (por su efecto laxante).
- La piel y las partes duras de frutas, pescados, aves o carnes.
- Evitar las bebidas tipo refrescos o con gas, zumos artificiales, café o alcohol.
- No tomar dulces (caramelos, chocolates, pastelería, azúcar…)
- No debe tomar antiinflamatorios mientras se encuentre con diarrea
Una vez tolerada la dieta astringente durante un par de días, ir reintroduciendo la dieta normal a base de carne y verduras (hervidas).
¿Y los probióticos?
Los probióticos son microorganismos vivos, como bacterias o levaduras, que son beneficiosos para el paciente. Y, por tanto, pueden ayudar a regular el tránsito intestinal.
Los estudios sugieren que algunos probióticos como Saccharomyces boulardii o bifidobacterias y lactobacilos, mejoran el ecosistema normal del individuo. Por lo que, de esta manera, ayudan a prevenir la aparición de diarreas, a reducir el tiempo de las mismas y, además, consiguen reforzar la respuesta inmune intestinal.
Existen metaanálisis realizados con los datos de diferentes ensayos clínicos aleatorizados que confirman que, tanto en niños como en adultos, el uso de probióticos está asociado con beneficios clínicos en el tratamiento de la gastroenteritis aguda. En concreto, una reducción de la duración de la diarrea aguda y una normalización de la consistencia y frecuencia de las heces.
¿Cuándo debería ir al médico?
- Sientes un dolor agudo intenso en el abdomen o en el ano.
- La fiebre es alta (mayor de 38,5ºC).
- Ves sangre y moco en las heces.
- Cuando mejoran los vómitos a pesar de los consejos propuestos.
- Si tienes verdadero malestar general, boca seca y piel pálida.
- Si no tienes fiebre, ni vómitos, ni presentas sangre en las heces, pero la diarrea no mejora después de 3 días con una dieta e hidratación correctas.
Referencias
https://www.elsevier.es/es-revista-revista-medica-clinica-las-condes-202-articulo-etiologia-manejo-gastroenteritis-aguda-infecciosa-S071686401470063X
https://www.msdmanuals.com/es/professional/trastornos-gastrointestinales/gastroenteritis/generalidades-sobre-la-gastroenteritis
