La rinitis se define como un trastorno que afecta a la mucosa que cubre el interior de la nariz o fosas nasales. No todas son iguales, y es por ello que hablamos de distintos tipos, según la causa o según la duración. Vamos a definirlas todas.
¿Qué es la rinitis?
La nariz constituye la puerta de entrada del aparato respiratorio y, como tal, presenta una serie de funciones importantes:
- Filtrar el aire.
- Humedecer el aire.
- Sentido del olfato.
- Cavidad nasal como caja de resonancia. La nariz y los senos paranasales contribuyen a modificar la voz.
- Mecanismo de defensa. Nos defienden de las agresiones de los diferentes agentes externos que pueden causar daño. Podemos hablar de infecciones o del polen.
Síntomas
La rinitis se define como un trastorno que afecta la mucosa que cubre el interior de la nariz o fosas nasales.
Este trastorno puede cursar con inflamación inicial o no, pero habitualmente presenta dos o más de los siguientes síntomas:
- Obstrucción nasal.
- Picor nasal.
- Secreción nasal anterior o posterior.
- Estornudos
Si estos síntomas aparecen durante más de una hora en dos o más días consecutivos y a lo largo de más de una hora la mayoría de los días, entonces estamos ante una rinitis.
Tipos de rinitis
Según la duración, podemos hablar de dos tipos:
- Agudas. Son aquellas cuya duración es inferior a 4 semanas.
- Crónicas. Si duran más de 4 semanas.
Según la gravedad se habla de leve, moderada y grave.
Tipos según su causa
Según su causa hay tres grandes tipos:
- Infecciosa. Está causada por infección por virus, bacterias, hongos o protozoos, siendo la más frecuente vírica.
- No infecciosa.
- Entre ellas encontramos la rinitis alérgica. Es la más común y en la que podemos distinguir: perenne, estacional y ocupacional.
- Rinitis vasomotora. Causada, principalmente, por uso de medicamentos vasoconstrictores nasales.
- Rinitis medicamentosa. Por uso de antidepresivos, antihipertensivos, vitamina A y anticonceptivos con progesterona.
- Rinitis hormonal. Consecuencia de problemas tiroideos o embarazo.
- Rinitis física. Causada por frío o humedad en el ambiente.
- Rinitis por alteración anatómica o mecánica. Generada por vegetaciones, tabique desviado, tumores o cuerpos extraños.
- Atrófica. Se caracteriza por la formación de costras secas gruesas en la mucosa de la nariz como resultado de la reducción del tamaño de la mucosa y el hueso subyacente.
RINITIS INFECCIOSA
La gran mayoría de las rinitis agudas son de origen infeccioso (casi siempre vírico). Pero puede existir otros orígenes: bacteriano, hongos o protozoos.
La rinitis aguda vírica es la enfermedad infecciosa más frecuente y representa el 40% de las infecciones respiratorias agudas.
Puede afectar a cualquier persona, estimándose que una persona padece una media de dos procesos al año.
Aproximadamente 2 ⁄ 3 de los pacientes con rinitis aguda vírica se curan espontáneamente sin necesidad de tratamiento médico. En el caso de rinitis agudas bacterianas o víricas complicadas y con duración de más de una semana se recomienda acudir al médico. En este caso será necesario el uso de antibióticos.
RINITIS ALÉRGICA
RINITIS ALÉRGICALa Rinitis alérgica (RA) es una enfermedad muy frecuente. Afecta en torno al 20% de la población española y es el principal motivo de consulta en Alergología.
Actualmente es una de las principales causas para acudir al médico de atención primaria.
Es más frecuente en áreas urbanas que en rurales, y se asocia a un estilo de vida “occidental”. Es más frecuente en países desarrollados.
Se debe considerar como un factor de riesgo para el asma. Hay datos que demuestran que la mitad de los pacientes con rinitis padecen asma, así como que entre un 70-90% de los pacientes con asma padecen, a su vez, rinitis. Los pacientes que padecen ambas presentan mayor gravedad y peor control del asma.
Se calcula que la rinitis alérgica afecta a más de 500 millones de personas en todo el mundo.
Tipos de rinitis alérgica
Los tipos pueden ser:
- Estacional. Se presenta en determinadas épocas de año. Alergia al polen o fiebre del heno. Es una reacción alérgica a substancias suspendidas en el aire (alérgenos) que ataca a las vías respiratorias.
- Perenne. Si es causada por alérgenos como ácaros del polvo doméstico, mascotas, polvo de la habitación, hongos, alimentos, etc.
- Ocupacional. Se produce en determinados ambientes de trabajo o por alergia a determinadas sustancias con las que estamos habitualmente en contacto. Encontramos: polvo de madera, pesticidas, látex, animales de laboratorio, tintes.
Todos los tipos pueden ser intermitentes y persistentes.
Síntomas
Los principales síntomas son:
- Obstrucción/congestión nasal.
- Secreción nasal acuosa.
- Dolor/sensación de presión en la cara.
- Pérdida de olfato (anosmia).
- Tos, que tiende a empeorar por la noche sobre todo si existe rinosinusitis.
- Dolor de cabeza.
- Fiebre
Se puede presentar también enrojecimiento de la garganta por irritación. Además, suele haber afectación de los ojos con lagrimeo, picor e inflamación, y puede existir dificultad para respirar o dolor cerca de las fosas nasales. Cuando aparecen dichos síntomas es conveniente acudir al médico.
La rinitis alérgica se manifiesta también con estornudos frecuentes, secreción nasal transparente, acuosa y lagrimeo constante.
Estos síntomas se presentan sobre todo en las mañanas, esto hace que sea confundido con un resfriado simple que viene acompañado de fiebre y no dura más de una o dos semanas.
Tratamiento de los distintos tipos
La mayoría de las rinitis afortunadamente curan de forma espontánea.
- En las rinitis medicamentosa, especialmente producida por tratamiento antihipertensivo, es preciso cambiar la medicación. La rinitis medicamentosa puede estar superpuesta o agravar otra rinitis.
- En la rinitis vírica, el tratamiento debe ir dirigido a la causa. Se suele asociar tratamiento sintomático. Para la obstrucción nasal el tratamiento lo constituye los descongestionantes nasales tópicos u orales (fármacos o fitoterapia), así como el uso de antisépticos nasales. La utilización de vasoconstrictores y antinflamatorios, de forma prolongada pueden provocar efectos no deseados, por lo que su uso debe ser recomendado por un profesional médico.
- En las rinitis atróficas se aconseja lavados nasales y aplicación tópica de lubricantes.
- Las rinitis hormonales requieren el tratamiento de la patología causante.
En cualquier caso el tratamiento debería ser supervisado por un médico previo a la realización de un diagnóstico correcto del tipo de rinitis.
