La glutamina es el aminoácido no esencial más abundante que podemos encontrar en nuestro organismo. Cumple funciones vitales para importantes procesos fisiológicos. La glutamina se considera imprescindible en situaciones de estrés metabólico y es fuente de energía importante para el músculo esquelético o el riñón.
Pero, en esta ocasión, nos centramos en su función inmune, ya que la glutamina es el principal combustible de los linfocitos, implicados en la defensa inmunitaria.
¿Qué es la glutamina?
La glutamina es el aminoácido libre más abundante en plasma y tejidos (2% en el líquido extracelular y más del 60% en el músculo esquelético), representa el 50% del total de aminoácidos del organismo. Es utilizado por múltiples sistemas biológicos básicos. La producimos de manera endógena, es decir, la produce nuestro organismo.
En individuos sanos, la producción diaria de glutamina es de 50-70 g.
Sin embargo, en algunas circunstancias como puede ser cuando hay radioterapia, quimioterapia, inflamación, trauma, sepsis, o en situación de estrés físico y mental, las demandas de este aminoácido aumentan, por lo que su suplementación es de suma importancia para mantener la integridad y funcionalidad del intestino.
¿Para qué sirve la glutamina? Usos y propiedades
La glutamina es un aminoácido que contiene dos átomos de nitrógeno, por lo que su función principal es el transporte del nitrógeno por todo el organismo, para que se puedan desempeñar las actividades metabólicas del cuerpo.
Pero la glutamina tiene muchas más funciones en diferentes tejidos como es el metabolismo del amoníaco y el aporte de energía.
Las funciones principales de la glutamina son:
- Principal fuente de energía de las células intestinales y de los linfocitos.
- Formación de glutamato, que es un neurotransmisor muy importante.
- Regulación del equilibro ácido-base. La glutamina es capaz de disociar el amoniaco en los riñones, favoreciendo la eliminación del ácido y manteniendo el bicarbonato.
- Participa en la neoglucogénesis hepática, a la vez que forma parte del ciclo de la urea.
- Ayuda a sintetizar otros aminoácidos (alanina, aspartato) mediante reacciones de transaminación en músculo, intestino e hígado.
- Interviene en la síntesis de las purinas y pirimidinas que forman la estructura del ADN y ARN.
- Formación de glutatión para neutralizar los radicales libres de oxígeno
Beneficios de tomar glutamina
La glutamina es un aminoácido extremadamente importante como sustrato de energía para el intestino, órgano que constituye uno de los tejidos con mayor actividad metabólica en el organismo, por lo que una cantidad significativa de la energía se utilizan para mantener su integridad y su actividad.
Además, dado que el intestino tiene acceso a los nutrientes de la dieta antes que los otros tejidos, los puede utilizar como sustrato energético. Se ha demostrado que la glutamina es la fuente de energía preferida por el tejido intestinal.
Por tanto, la glutamina es beneficiosa para las personas en situaciones de estrés o de aumento de las demandas de energía . Esto incluye personas mayores, pacientes posoperatorios, deportistas o personas debilitadas.
Alimentos que contienen glutamina
Un estado nutricional adecuado es sinónimo de una buena función de defensa del organismo. Podría considerarse el sistema inmunitario como un paraguas, capaz de proteger al organismo del ataque de microorganismos (bacterias, virus, parásitos), alérgenos, toxinas, células malignas, etc., frente al desarrollo de infecciones, alergias, toxicidad, cáncer o procesos inflamatorios.
Por tanto, una de las principales recomendaciones para mantener este sistema inmune a punto es llevar una alimentación variada, bien planificada y que contenga una alta densidad nutricional, que nos aporte la mayoría de los nutrientes necesarios.
Nos centramos en los alimentos que contienen glutamina:
- Carne, principalmente la de pollo y la de ternera. Los alimentos de origen animal son los que más cantidad de glutamina contienen, entre 5 y 8 gramos de glutamina por cada 100 gramos de carne. Por tanto, su consumo ayuda a proteger a cada célula de nuestro cuerpo del daño celular, que puede provocar muchas enfermedades crónicas.
- Huevos. Contienen 0,6 gramos de glutamina por cada huevo. Este alimento, además, juega un papel importante en la dieta, es un ingrediente básico en la cocina y de alto valor nutritivo. El huevo es especialmente rico en aminoácidos esenciales, ácidos grasos y algunos minerales y vitaminas necesarios en la dieta.
- Leche. Es una buena fuente de proteína y contiene una cantidad significativa de glutamina: una taza de leche, unos 240 ml, contiene alrededor de 0,6 gramos de glutamina.
- Los frutos secos también son ricos en proteínas y glutamina. Por ejemplo, una porción de 28 gramos de almendras contiene alrededor de 0,4 gramos de glutamina.
- Las espinacas son ricas en nutrientes y contienen una cantidad significativa de glutamina. Una porción de 100 gramos de espinacas cocidas puede contener alrededor de 0,6 gramos de glutamina.
- Coliflor. Es una verdura crucífera que es rica en nutrientes y una porción de 100 gramos de coliflor cocida puede contener alrededor de 0,3 gramos de glutamina.
Como hemos mencionado, en situaciones catabólicas, como la radioterapia y el estrés, las necesidades de glutamina por parte del organismo superan la producción endógena, siendo necesario su aporte en el contexto del soporte nutricional. Se ha demostrado utilidad en:
- Recuperación de lesiones traumáticas, como puede ser la recuperación de caídas.
- Consigue reducir el estrés físico y mental.
- Trastornos intestinales: diarreas o malos hábitos alimenticios.
- En deportistas, para evitar la pérdida de masa muscular y aumentar la resistencia.
- Traumatismos.
- En postoperatorios.
- Infecciones.
Referencias
https://scielo.isciii.es/pdf/nh/v32n4/05revision05.pdf
https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-inmunidad-nutricion-13086165
