Actualmente, los médicos sugieren como base para tratar el insomnio: cambios en el estilo de vida, tratamientos cognitivo-conductuales y medicamentos.
El pilar principal del tratamiento consiste en actuar sobre los cambios de rutina y estilo de vida intentando mejorar la calidad del sueño. Pero, ¿y si te decimos que el sexo te puede ayudar a mejorar tu calidad del sueño? ¡Presta atención!
¿Qué provoca la falta de sueño?
El sueño es esencial para la salud, el estado de ánimo y el rendimiento del organismo. Las consecuencias de no dormir lo suficiente son varias, se ha relacionado con la obesidad, el metabolismo deficiente de la glucosa, la función inmunológica deficiente, la consolidación del aprendizaje y la memoria y el bienestar psicológico.
El insomnio se caracteriza por problemas para iniciar o mantener el sueño y va acompañado de pérdida de horas de sueño y calidad del mismo, con el consiguiente deterioro del organismo.
Es un trastorno que afecta, en general, a un porcentaje importante de la población. 1 de cada 5 personas padece insomnio y un porcentaje elevado son mujeres. Por ello, es el trastorno del sueño más prevalente en la sociedad.
Este trastorno puede provocar muchos otros problemas de salud graves.
Cambio de estilo de vida y medidas higiénicas del sueño
Actualmente, los médicos sugieren como base para tratar el insomnio cambios en el estilo de vida, los tratamientos cognitivo-conductuales y los medicamentos.
El pilar principal del tratamiento consiste en actuar sobre los cambios de rutina y estilo de vida intentando mejorar la calidad del sueño.
Existen numerosos cambios en el estilo de vida y medidas de higiene del sueño que pueden ayudarnos a mejorar el insomnio como son:
- Establecer un horario regular
- Evitar siestas largas
- Evitar el alcohol, excitantes y tabaco
- Hay que evitar las comidas copiosas
- Realizar ejercicios de relajación
- Evitar una habitación calurosa
- Evitar la luz blanca y ruidos fuertes procedentes de pantallas o televisión
- Reservar la cama para dormir y el sexo, evitando su uso para el trabajo o la recreación general
En base a estas medidas mencionadas de higiene del sueño, podemos hacernos una pregunta…
¿Tener relaciones sexuales antes de dormir ayuda a dormir mejor?
Las investigaciones nos revelan que la falta de sueño puede conducir a una disminución del estado de ánimo, la libido y de las emociones.
Actualmente no hay suficientes datos sólidos y concluyentes que indiquen que mantener relaciones sexuales provoque sueño. Pero, eso sí, existen datos analíticos y mecanismos básicos que se producen tras la relación sexual que muestran que el sexo puede ayudar a conciliar el sueño.
De hecho, aquellas personas con una mala higiene del sueño presentan una disminución de la tasa de relaciones sexuales. Además, existen datos que indican que un tercio de la población duerme pocas horas, menos de 6 horas al día.
¿Qué cambios hormonales ocurren durante las relaciones sexuales?
Durante la relación sexual se producen una serie de cambios hormonales y de determinadas sustancias químicas en nuestro organismo.
Existe liberación de hormonas como la oxitocina, serotonina, vasopresina, prolactina, neurotransmisores como la dopamina u opiáceos endógenos (relacionados con el placer). Todas estas hormonas conducen a un estado de relajación total que permiten tener un sueño prolongado y reparador.
La serotonina y la oxitocina favorecen el sueño. La oxitocina se libera durante la relación sexual. No en vano se la denomina hormona del amor y se produce como respuesta a sentimientos de afecto y contacto, provocando placer y bienestar y reduciendo el estrés.
La dopamina y la prolactina, provocan sensación de alivio, relajación y somnolencia después de tener relaciones sexuales, pero son necesarias más investigaciones. Se ha relacionado a la vasopresina (Hormona antidiurética) en modelos animales con la somnolencia.
Se ha observado que en personas existe un aumento de vasopresina durante la excitación sexual y el orgasmo.
Todas estas hormonas por sí solas no hacen sentir somnolencia pero relajan, y hacen sentirse mejor, por lo que, es probable que duermas mejor.
¿Qué dicen las investigaciones?
Un análisis de investigación realizado hace pocos años sugería que tener relaciones antes de dormir puede disminuir el estrés y, posiblemente, ayudar a las personas con insomnio a iniciar y mantener su sueño.
Otras investigaciones realizadas encontraron que más del 60% de adultos que tuvieron relaciones sexuales habían dormido mejor. Se encontró que las mujeres tenían unos niveles de estrógenos elevados después de tener relaciones lo que favorecía algunas fases del sueño.
Los hombres, tenían un aumento de la prolactina, lo que producía una sensación de saciedad sexual que inducía el sueño. En base a estas investigaciones se puede decir que mantener relaciones sexuales se asocia con mejor sueño y dormir bien se asocia con más deseo sexual.
Se ha observado que cuando la persona duerme más horas de sueño (más de 6 horas), las probabilidades de tener relaciones sexuales al día siguiente con su pareja aumentan.
Todos estos resultados indican que dormir bien por la noche puede promover el deseo sexual saludable y la excitación en las mujeres.
Existen otros trastornos del sueño que también están en relación con la privación de sueño y el deseo sexual. Nos referimos al sonambulismo sexual o sexsomnia.
¿Qué es el sonambulismo sexual?
Es un trastorno del sueño poco frecuente que hace que una persona sea capaz de mantener relaciones sexuales al estar dormido/a y que al despertar no recuerde absolutamente nada de lo ocurrido.
Se trata de una situación similar al sonambulismo, en el que las personas que se levantan de la cama, caminan, hablan, o realizan otro tipo de actividades totalmente dormidos. Tampoco son conscientes de sus actos.
Sin embargo, en este caso, el trastorno está relacionado con la actividad sexual del individuo mientras está dormido.
¿Qué puede influir en este sonambulismo sexual?
Existen una serie de factores que influyen en la aparición de sonambulismo sexual:
- Ansiedad y estrés
- Falta de sueño
- Consumo de alcohol y sustancias estupefacientes.
- Abuso de ciertos fármacos.
- Enfermedades psíquicas sexuales.
- Otros trastornos del sueño como: apnea obstructiva del sueño, síndrome de la pierna inquietas
Es importante confirmar que la persona que padece este trastorno no consume fármacos o posea condiciones que justifiquen su comportamiento y la ausencia de recuerdos.
Es un trastorno raro que puede alterar de forma muy importante la vida de una persona. Por ello es importante consultar a un médico especialista para evaluar el tratamiento adecuado.
Referencias
Khodr, A., Awada, C., Mohammed, M., & Najjar, R. (2016). Bump and Sleep: How Sexual Intercouse Can Improve Sleep of Women with Insomnia.
https://www.cqu.edu.au/cquninews/stories/research-category/2017/this-valentines-day-remember-that-sleep-can-be-sexy
