¡Qué molesto es experimentar dolor de pecho al toser! Es una sensación incómoda y sí, puede asustar a más de uno que lo sufre, más que nada porque se trata de una zona que se relaciona con los órganos tan importantes que encierra, es decir, el corazón y los pulmones.
Antes de continuar, es muy importante tener presente que, si el dolor es intenso y/o persistente, hay que acudir al médico de inmediato para descartar complicaciones y encontrar el tratamiento adecuado, si fuera necesario.
El dolor de pecho es una molestia que se siente a lo largo de la parte delantera del cuerpo entre el cuello y la parte superior del abdomen.
Son muchas las causas por las que puede doler el pecho sin que tenga nada que ver el corazón, aunque sigue siendo el síntoma más común como consecuencia de un flujo sanguíneo deficiente al corazón. De hecho, el dolor puede ocurrir cuando el corazón no está recibiendo suficiente sangre u oxígeno. Asimismo, la cantidad y el tipo de dolor puede variar de unas personas a otras. Tal es así que la intensidad no siempre se relaciona con lo tan grave que sea el problema.
Causas del dolor de pecho al toser
A pesar de que una causa de dolor en el pecho tenga que ver con el corazón, lo cierto es que existen otras causas más habituales y menos graves.
La realidad es que sea la causa que sea la que provoque dolor torácico, el hecho de toser puede aumentar su intensidad, más habitual cuando se padecen ciertas afecciones del sistema respiratorio donde, probablemente, tos y flemas por la mañana sea lo más frecuente.
Tos
La propia tos puede ser una de las causas. La tos es un síntoma persistente y molesto que es el primero en aparecer y el último en desaparecer dependiendo del problema respiratorio que se sufre. Hay que recordar que gracias a la tos se expulsan las secreciones que se pueden ver incrementadas por algún proceso infeccioso.
Efectivamente, la tos puede provocar dolor de pecho bien por una contractura muscular, problemas pulmonares, trastornos óseos o alteraciones del estado emocional.
Resfriado común
Es una enfermedad viral infecciosa del aparato respiratorio, más común en niños que en adultos.
Los síntomas del resfriado aparecen progresivamente alrededor del tercer día de contagio. Junto con el malestar general, el dolor de garganta y el aumento de la mucosidad, la tos es habitual, la cual puede provocar dolor en el pecho, sobre todo, si es repetitiva. El aumento de presión en la cavidad torácica hace que los tendones se tensen, se dificulte la relajación al estar de manera continuada tosiendo y genere ese dolor.
Gripe
Es una de las afecciones virales más habituales como consecuencia de su fácil contagio, al igual que ocurre con el resfriado común. También suelen ser estacionales.
Suele aparecer de forma abrupta, con síntomas intensos desde el principio como la fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular, escalofríos y dolor en el pecho.
A diferencia del resfriado común, los síntomas suelen ser más fuertes y duraderos, con molestias respiratorias menores, pero molestias que afectan a todo el cuerpo por lo que es habitual presentar dolor en el pecho, que puede aumentar de intensidad si se tiene tos.
Bronquitis aguda
Literalmente, es la inflamación de los bronquios. Tras una bronquitis, la capacidad respiratoria puede verse limitada, tanto al inhalar como al exhalar, pudiendo dar lugar a sibilancias, aumento de la mucosidad, dolor de pecho y de espalda y tos.
La bronquitis aguda puede ser debido a un resfriado “mal curado” y, el hecho, de que los pulmones no puedan recibir todo el aire necesario, puede notarse opresión en el pecho que puede acompañarse de dolor. De nuevo, dolor en el pecho y tos, van unidos.
Asma
Se trata de una afección crónica que, debido a la inflamación, cursa con estrechamiento de las vías respiratorias, por lo que el aire tiene dificultades para pasar y los pulmones para expandirse. Como consecuencia, sin un tratamiento adecuado, es normal sufrir presión en el pecho, dificultad para respirar, pitidos y dolor de pecho al toser.
Neumotórax
Es un colapso pulmonar que se produce cuando el aire se filtra dentro del espacio que se encuentra entre los pulmones y la pared torácica. El aire ejerce presión en la parte externa del pulmón y causa el colapso. La presión que causa el aire fuera de los pulmones provoca un dolor en el pecho que se acentúa cuando se tose.
Lesiones musculoesqueléticas
Una lesión en los músculos o huesos del pecho o próximos a este, puede que curse con dolor, dolor que será más intenso cuando se tose. Las fisuras o fracturas en las costillas, en el esternón o en la columna vertebral pueden provocar un dolor intenso que se puede sentir al levantarse, al realizar algún determinado movimiento, simplemente cuando se respira y lógicamente al toser.
Pleuritis
Tanto los pulmones como la cavidad torácica están recubiertos por una membrana serosa denominada pleura. Estimulan la lubricación de los pulmones y los protegen para que se expandan sin problemas al inhalar el aire. Entre la pleura y la cavidad torácica hay un espacio relleno de una pequeña cantidad de líquido llamado líquido pleural. La inflamación de estas láminas puede dar lugar a dolor en el pecho que varía en intensidad en función de la persona y la gravedad.
Costocondritis
Es la inflamación del cartílago que une las costillas con el esternón dando lugar a un dolor agudo y punzante. Es más frecuente entre las mujeres y en edades avanzadas. Suele deberse a lesiones torácicas, al levantar peso, ciertos tipos de artritis, infecciones respiratorios o al hacer demasiado esfuerzo al toser.
Cómo aliviar el dolor de pecho al toser
Como se ha podido comprobar, el dolor de pecho al toser está relacionado, en la mayoría de los casos con una infección respiratoria debido a que se produce un exceso de mucosidad que puede influir en la presión en el pecho.
Para prevenir o, al menos, aliviar el dolor que se produce, puede ser interesante seguir estos hábitos:
- Quien evita la ocasión, evita el peligro, así que mantén una buena higiene de manos para evitar contagios
- Evita las aglomeraciones y mantén el distanciamiento social, sobre todo, en épocas en las que los virus de la gripe estén entre nosotros
- Ventila y humidifica los espacios en donde te encuentres habitualmente
- Hidrátate, bebe suficiente agua durante todo el día
- Controla el estrés, sigue una dieta variada y equilibrada y practica el descanso adecuado, según tu edad
- En caso necesario, recurre a complementos alimenticios como jarabes para la garganta que contengan vitamina C y un buen número de extractos de plantas medicinales como el plantago, malva, malvavisco, echinacea y tomillo para aliviar tanto la tos seca como productiva
Como sigas tosiendo te va a doler el pecho… ¡y lo sabes!
BIBLIOGRAFIA
https://www.neumomadrid.org/wp-content/uploads/manual_neumo_nm.pdf
