Peluqueros, camareros, vigilantes de seguridad o los auxiliares de vuelo son profesionales que trabajan muchas horas de pie y casi todos suelen quejarse de padecer un síntoma muy característico: las piernas cansadas.
Por otro lado, tendemos a pensar que trabajar sentado es algo ligero y saludable. Pues nada más alejado de la realidad.
Una de las principales causas de sufrir piernas cansadas y otros síntomas de la enfermedad venosa crónica es estar sentado durante mucho tiempo, ya que se disminuye el retorno venoso.
Por tanto, a continuación, hablaremos de cómo evitar las piernas cansadas y que el trabajar sentados no nos afecte a la salud.
¿Por qué tengo las piernas cansadas? Síntoma de la enfermedad venosa crónica
La principal función de las venas es la de transportar sangre al corazón. Esto lo consiguen gracias a que su interior tiene un aparato valvular que permite el paso de la sangre únicamente hacia el corazón.
Si el aparato valvular falla y deja de cumplir su función, se produce una dificultad para transportar la sangre en dirección al corazón y esta tiende a acumularse.
Esto puede ocurrir en cualquier parte del cuerpo, pero se produce casi exclusivamente en las extremidades, sobre todo en las piernas. Es entonces cuando aparecen los síntomas de la insuficiencia venosa crónica, como las piernas cansadas.
La enfermedad venosa crónica constituye una de las enfermedades más prevalentes en los humanos y es el principal motivo de consulta por patología vascular en atención primaria. Es por ello importante que el médico realice un diagnóstico precoz y que establezca medidas preventivas.
Uno de los síntomas más característicos de la enfermedad son las varices que afectan a un importante porcentaje de la población adulta española. Pero no son los únicos síntomas. Dolor, pesadez, calambres, piernas cansadas, prurito o úlceras son otras manifestaciones clínicas de la enfermedad.
Cómo influye en nuestra circulación venosa trabajar sentado
Estar sentado muchas horas puede resultar perjudicial para la salud si no tenemos en cuenta los elementos que intervienen en la realización del trabajo, principalmente la silla y la mesa. Pero, también, es importante tener la posibilidad de cambiar de posición de vez en cuando.
Los músculos en las piernas juegan un papel muy importante en la circulación, ya que al estar en movimiento actúan como bomba para mover la sangre de las piernas de vuelta al corazón.
Cuando estamos sentados muchas horas o de manera prolongada, este movimiento no se produce y provoca que disminuya el retorno venoso y aumente la presión en las venas de las extremidades inferiores, acumulando la sangre.
¿Cómo podemos evitar las piernas cansadas?
Si nuestro trabajo nos obliga a permanecer muchas horas sentados, ante todo, y como primera medida, hay que intentar mantener las piernas en alto.
Cuando estemos sentados frente al ordenador hay que intentar colocar las piernas elevadas del suelo. Para esto puede ser bueno utilizar un reposapiés.
Se deben hacer esfuerzos para diseñar puestos de trabajo que requieran la adopción de posturas corporales variadas. Otros consejos que puedes seguir para evitar las piernas cansadas tanto si trabajas en la oficina como en casa son:
- Ponte de pie cada 15 o 30 minutos.
- Si te llaman o llamas por teléfono, aprovecha para ponerte de pie y dar unos pasos mientras hablas.
- Rota los tobillos. Cuando estés sentado, haz sesiones de rotaciones con los tobillos, primero hacia fuera y luego hacia dentro.
- Haz estiramientos. No te cortes, y mientras estás sentado, haz estiramientos de brazos, tronco, cuello y tronco y evitarás la rigidez.
- Procura no cruzar las piernas.
Pero por supuesto, no te olvides de…
- Dormir con las piernas levantadas, unos 10 o 20 centímetros.
- No lleves ropa demasiado ajustada. Es mejor utilizar prensas amplias y de tejidos naturales que permitan que la piel transpire.
- No utilices fajas, ligas ni calcetines que compriman y dificulten la circulación.
- Aléjate de las fuentes de calor como las estufas o radiadores, así como de la exposición excesiva al sol.
- Date duchas de agua fría en las piernas y masajea los pies y las piernas periódicamente.
- Hidrata la piel.
- Mantén un peso adecuado y evita el estreñimiento. El aumento del tejido adiposo en las piernas anula la eficacia de la bomba muscular. Para ello, lleva una dieta rica en fibra y además baja en calorías si tienes problemas de sobrepeso.
¿Existen cremas para mejorar la circulación?
Existen cremas o geles en cuya composición se encuentren plantas ricas en flavonoides, como la vid roja, el castaño de indias, el rusco o la centella asiática.
Este grupo produce un alivio rápido de las molestias asociadas a los trastornos del retorno venoso porque consiguen reducir rápidamente la sensación de cansancio y pesadez en las piernas.
A la hora de aplicar estas cremas es interesante realizarlo con un masaje, con movimientos circulares, empezando por los tobillos y subiendo poco a poco hasta llegar al muslo.
¿Por qué hacerlo con un masaje? Porque ayudaremos a evitar la acumulación de líquidos en la zona. Los masajes de las piernas, desde el pie hacia el muslo, siguiendo el sentido de la circulación venosa, aumenta la velocidad de retorno venoso. Céntrate en cada zona 3 o 4 minutos y hazlo mejor por la tarde.
Estar sentado no sólo influye en la mala circulación
Las molestias más comunes producidas por realizar el trabajo sentado y de una manera prolongada son las que se padecen en las cervicales, abdominales y los trastornos en la zona lumbar de la espalda.
La falta de movimiento también ocasiona cambios en el metabolismo, reduce la cantidad de alimento que se convierte en energía y, por lo tanto, promueve la acumulación de grasa lo que puede llegar a provocar obesidad. Además, genera altos picos de azúcar en la sangre luego de la ingesta de alimentos.
Referencias
https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-insuficiencia-venosa-prevencion-tratamiento-13129193
https://www.semergen.es/resources/files/noticias/venosaCrocina_1.pdf
https://www.cgcom.es/sites/default/files/guia_venosa.pdf
